Quien piense que la accesibilidad es solo una cuestión de salir de casa se equivoca. Debido al crecimiento en el número de personas mayores, los hogares están adquiriendo una nueva mirada por parte de los profesionales de la industria para que puedan permitir y facilitar el ir y venir y, en consecuencia, mejorar la calidad de vida de muchas personas.
Ante este hecho, la asistencia a las personas con movilidad reducida, y que no quieren renunciar a su autonomía y mucho menos mudarse de casa, se ha venido dando a través de la creación de productos como, por ejemplo, el silla salvaescaleras Levant.
Comodidad y seguridad
De fácil manejo, el salvaescaleras forma parte del portafolio de la División de Accesibilidad y su principal característica es permitir el acceso a todas las plantas de la casa con comodidad y, sobre todo, con la seguridad necesaria.
La independencia del usuario se hace palpable por la funcionalidad de este producto: el asiento gira 90º, colocándolo frente al piso en el extremo superior de la escalera, y se bloquea en su lugar para que la persona pueda levantarse y salir fácilmente, sin depender de ayuda. El desplazamiento se realiza con comodidad y estabilidad, apoyado en el diseño ergonómico de la silla, que combina modernidad y forma compacta.
La seguridad es otro punto fuerte de Levant. Cuando la silla está en movimiento, los sensores de seguridad presentes en tres puntos del reposapiés detienen el equipo en caso de que se detecte algún objeto en el camino. Además, una alerta sonora indica que la silla ha llegado al final de su recorrido y la presencia de un cinturón de seguridad ajustable aporta aún más protección, cubriendo todas las necesidades esenciales para este tipo de producto.
Es más: es una silla que no interfiere con la vida de otros vecinos que van y vienen, suben y bajan las escaleras de la casa. Tanto el asiento como el reposapiés, que tiene bordes de seguridad en ambos lados, se pliegan fácilmente, de forma compacta y sin ocupar mucho espacio.
El silla salvaescaleras Levant incluso facilita la vida de la familia cuando más de una persona necesita utilizar el equipo. Eso es porque el producto cuenta con dos controles remotos para llamar y enviar la silla. Estos controles tienen un amplio alcance y cuentan con un botón de presión constante para que cualquier persona que use la silla salvaescaleras pueda operarlos fácilmente. Esto significa que cuando deja de presionar, la silla se detiene de inmediato.
Integración con entornos
La seguridad y la facilidad de uso son fundamentales, pero también es importante contar con un equipamiento que se integre con el entorno, sin comprometer la decoración. Por eso, la silla Levant presenta un diseño moderno y colores neutros en el asiento y el reposapiés. Los rieles están fabricados en aluminio anodizado, es decir, una protección extra por el aislamiento eléctrico y la resistencia del material.
La practicidad de la silla salvaescaleras también es una realidad a la hora de pensar en su limpieza, ya que está fabricada con un material resistente e impermeable, y la autonomía del equipo. Sí, es un producto que se puede utilizar en periodos sin electricidad. Pero vale la pena tener especial cuidado: apague la llave cuando la silla no esté en uso, evitando el desgaste de la batería.
Por todas estas características, el Silla Salvaescaleras Levant, equipo de nuestra línea Accesibilidad, ha ido conquistando cada vez a más consumidores. Para cada necesidad, desarrollamos un producto de accesibilidad.